Orihuela, el destino donde encontrar todo e incluso empezar de nuevo

Si eres una de esas personas que quieres darle una vuelta a tu vida y comenzar de nuevo, tienes que leer este artículo. Si eres una persona, simplemente, que quieres disfrutar de un maravilloso lugar donde olvidarte de todo, simplemente tienes que visitar Orihuela. ¿Lo conoces?

Orihuela es una ciudad de la provincia de Alicante, en la Comunidad Valenciana. Situada en el extremo suroccidental de la provincia y en el límite con la comunidad autónoma de Región de Murcia, es capital de la comarca de la Vega Baja del Segura. Tiene 82 449 habitante, según el INE 2023. Y es el sexto en población de la Comunidad Valenciana. La ciudad destaca, entre varias cosas, por su patrimonio cultural y natural, en especial por su casco histórico, por sus fiestas, entre ellas su Semana Santa, que está declarada de interés turístico internacional, sus fiestas de la reconquista (declaradas de interés turístico nacional) y por sus playas. Y en mi caso, por ser el mejor sitio para perderse y encontrarse.

Qué ver y qué visitar en un par de días

Para empezar tu visita a Orihuela, te recomiendo que empieces por el casco antiguo de la ciudad, donde podrás visitar la Catedral de Orihuela, el Palacio Episcopal, el Seminario Diocesano, las Murallas Medievales y el Museo Diocesano de Arte Sacro. La verdad es que son sitios muy curiosos, donde te puedes empapar de la cultura de esta zona valenciana. Te vas a dar cuenta de la importancia que tuvo en siglos pasados.

Después, te sugiero que te acerques al Parque Natural de la Sierra de Orihuela, donde podrás disfrutar de la naturaleza y hacer senderismo en sus senderos señalizados. Y es que una de las buenas cosas que tiene este lugar es que puedes conjugar mundo urbano con mundo natural. Es el momento para respirar fondo y coger aire. La ocasión perfecta para desconectar y pensar que la vida puede ser maravillosa.

Y es que el clima te puede también enamorar. Es mediterráneo-subtropical seco, con varias zonas áridas. Las temperaturas anuales medias son de 18,5 °C; las temperaturas son benignas, con unos 14-17 °C en invierno de máxima y 3-8 °C de mínima, pudiendo producirse heladas, aunque normalmente sean muy débiles, generalmente, no hay ningún mes del año en la ciudad en el que no se alcancen o sobrepasen los 20 °C, y eso la verdad para alguien que viene de Valladolid como yo, lo agradecí mucho.

Qué comer

En cuanto a la gastronomía, en Orihuela no puedes dejar de probar platos típicos como el arroz y conejo, el caldero de pescado, las gachasmigas o los dulces típicos como el pan de higo o los rollos de anís. Y no te preocupes de los lugares, en todos los restaurantes y bares son muy profesionales y van a estar encantados de atenderte.

Para finalizar tu visita, te recomiendo que te acerques al mirador de Las Huertas, donde podrás disfrutar de unas vistas impresionantes de la ciudad y su entorno. Ahí fue el sitio donde decidí que yo me quería quedar en este lugar para siempre. Sin duda, un momento para el recuerdo.

Situación de la vivienda

Y una vez que conoces estos sitios para visitar, es el momento en el que tienes que decidir si quieres pasar el resto de tus días aquí. Y por la vivienda, un problema que existe en muchos lugares del país, no te tienes que preocupar porque aquí puedes encontrar mucho y a buen precio. La inmobiliaria Redoriol nos pone como ejemplo un quinto piso, donde puedes disfrutar de impresionantes vistas al río Segura y al campo de fútbol desde el balcón del salón. El piso es muy luminoso, ideal para disfrutar de la luz natural todo el día y lo puedes tener por 131.500 euros. Pero no hace falta comprar, también se puede alquilar, nos indican desde Redoriol.

La costa está ampliamente edificada debido al gran «boom» turístico y residencial. Sin embargo, todavía conserva importantes enclaves vírgenes como la cala de la Mosca, Sierra Escalona y diversos barrancos de mucho interés. Destaca de modo importante la Dehesa y la Pinada de Campoamor.

La verdad es que Orihuela es un sitio que merece la pena conocer. No sé si será para quedarte toda la vida, pero al meno sí para hacerlo un mes y conocer todos los encantos que tiene. Un buen sitio para caminar, para olvidarte de todo, para disfrutar de una excelente gastronomía y para conocer a gente maravillosa.

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