Los tratamientos dermatológicos han dado un giro sorprendente en las últimas décadas, gracias a la constante investigación en biotecnología y a la evolución de la ciencia médica. Métodos como los rellenos dérmicos y el microneedling se han convertido en opciones destacadas para quienes buscan soluciones menos invasivas, pero altamente efectivas para el rejuvenecimiento facial y el tratamiento de diversas imperfecciones de la piel. Estas técnicas abordan las preocupaciones estéticas y, además, mejoran la salud y apariencia de la piel a nivel celular, lo que las convierte en procedimientos atractivos para una amplia gama de personas. Vamos a echar un vistazo a cómo estos tratamientos se basan en principios científicos y cómo han logrado convertirse en una opción recurrente en la medicina estética.